La Agencia Andaluza de la Energía ha culminado la rehabilitación de su sede central, situada en el Pabellón de Portugal del PCT Cartuja. Esta actuación convierte el pabellón en el primer edificio de consumo casi nulo del Parque, lo que le ha permitido reducir casi a la mitad la factura eléctrica en un periodo de seis meses desde que finalizaron las obras. La iniciativa emprendida por la Agencia Andaluza de la Energía se enmarca, además, en su contribución al proyecto eCitySevilla, iniciativa de colaboración público-privada pionera en España liderada por la Junta de Andalucía (a través de las consejerías de Universidad, Investigación e Innovación y de Industria, Energía y Minas -mediante la Agencia Andaluza de la Energía); el Ayuntamiento de Sevilla, el Parque Científico y Tecnológico Cartuja (PCT Cartuja) y Endesa y a la que ya se han sumado casi un centenar de entidades, entre empresas, instituciones, universidades y centros de investigación.

El proyecto plantea el desarrollo en la Isla de la Cartuja de un modelo de ciudad en ecosistema abierto, digital, descarbonizado y sostenible en 2025, adelantando en veinticinco años los objetivos de energía y clima establecidos para 2050. 

Esta rehabilitación de la sede de la Agencia se ha centrado en la eficiencia energética, la implementación de fuentes de energía renovable y en un sistema para el seguimiento, control y optimización de los parámetros, y que ha sido cofinanciada con 2 millones de euros de fondos FEDER y del programa europeo ENI CBC MED, gracias a la cual ha logrado la calificación energética A.

Así, entre las medidas llevadas a cabo, el que fuera antiguo pabellón de Portugal de la Exposición Universal de 1992 (que nació para tener una vida útil de seis meses y que contaba con una letra C en eficiencia energética), se ha mejorado el aislamiento térmico de la cubierta, se han instalado 130 paneles solares fotovoltaicos que generan cerca de 91.000 kWh con los que se cubre algo más del 50% del consumo total del edificio, a los que se suman dos baterías que sacan el máximo rendimiento a la instalación de autoconsumo y permiten cubrir picos de demanda eléctrica en momentos puntuales para no generar excesos de potencia.

También se ha renovado la climatización por equipos con caudal de refrigerante variable, así como de recuperación de calor y enfriamiento gratuito; la iluminación interior se ha cambiado por tecnología LED, con control de encendido/apagado y del flujo luminoso según la luz natural y la presencia de personal; se han sustituido las ventanas metálicas y algunas con carpintería de madera por otras de mejores prestaciones energéticas con introducción de lamas motorizadas horizontales y verticales,  y se han instalado elementos móviles de protección y control solar gestionados a través de un sistema centralizado para aprovechar mejor la iluminación natural, evitar los deslumbramientos en algunos puestos de trabajo y minimizar el consumo de la instalación de climatización.

Además del edificio principal, también se ha rehabilitado energéticamente el edificio anexo de la Agencia, destinado a sala de usos múltiples y almacenes, donde se ha llevado a cabo el aislamiento térmico en el falso techo, suelo y paredes, se han sustituido ventanas y puertas, renovado la climatización e iluminación, y se ha puesto una instalación solar fotovoltaica de 12 kW (kilovatios) con almacenamiento, con un grado autoconsumo superior al 50%, a través de la cual se alimenta una infraestructura de recarga para dos vehículos eléctricos. 

Todas estas obras se han ceñido a la rehabilitación energética para reducir el consumo de energía del edificio, manteniendo la parte estética de fachadas, suelos, baños o puertas de entrada a las plantas y estancias, tal y como estaban tras las pequeñas reformas realizadas a lo largo de 32 años para adaptarlo a su actual uso administrativo.

La aplicación conjunta de todas las medidas de ahorro y eficiencia energética en la sede y el anexo, así como de las dos instalaciones renovables, han permitido un ahorro del 47% (estimado en unos 158 MWh de ahorro de energía final), del total del consumo eléctrico en los seis primeros meses del año 2024 de la Agencia Andaluza de la Energía, el equivalente al consumo eléctrico anual de 41 hogares; lo que supone además una reducción de emisiones contaminantes de 84 toneladas de C02 anuales.