Directora Gerente de la Asociación de Parques Científicos y Tecnológicos de España (APTE). Licenciada en Periodismo por la Universidad de Málaga, EMBA y experta en Marketing Digital por ESIC Business School.
Soledad Díaz trabaja en APTE desde hace 22 años. Durante este tiempo ha desarrollado más de 40 proyectos relacionados con actividades de promoción de la innovación, de apoyo al crecimiento de empresas, de vocaciones STEAM y de transformación digital.
Es coautora del paper publicado en la revista Journal of Gender Studies: "Science and Technology as Femenine: raising awareness about and reducing the gender gap in STEM careers". También es autora de un capítulo del libro editado por Palgrave denominado "Science and Technology Parks and Regional Economic Development, an international perspective".

PREGUNTA: Por tu amplia experiencia, ¿qué aporta la mujer en los cargos de gestión?
RESPUESTA: Aporta sobre todo diversidad; el contar con otra opinión, con una nueva manera de abordar la toma de decisiones. También aportan un nuevo método. Somos muy metódicas. Además, creo que también influyen decididamente en la creatividad, constancia y resiliencia, ese concepto que ahora está tan de moda. Las mujeres también aportamos el enfoque directo a los resultados, tanto a medio como a largo plazo. 

P: ¿Han evolucionado las mujeres en cuanto al acceso a puestos directivos?
R: Sí, se ha evolucionado en los últimos años. Sin embargo, todavía queda mucho camino por delante, sobre todo en la alta dirección, en la presidencia de las grandes empresas, en la participación en los consejos de administración de las empresas cotizadas. Aún queda mucho por hacer. 
Afortunadamente, la sociedad actual está muy enfocada en que la participación en esta alta dirección y en la dirección de empresa no signifique un sacrificio personal, sino que se pueda compaginar, que se pueda conciliar el plano personal con el profesional. Esto es fundamental para que cualquier persona pueda hacer lo que se proponga.

P: ¿Qué papel juegan las mujeres en el impulso a las vocaciones científicas y tecnológicas?
R: Su papel es fundamental. Tradicionalmente han sido las grandes olvidadas y, por tanto, al no tener visibilidad, ha influido a acrecentar esa brecha de género en este ámbito tan importante de la economía, al igual que en la ciencia y en la tecnología. 
Precisamente en el programa Ciencia y Tecnología en Femenino (en el que participa activamente el PCT Cartuja) ponemos el foco justo ahí, en dar visibilidad a las grandes profesionales que están en el entorno de los parques científico y tecnológicos, para que sirvan de referente a la nueva generación. Afortunadamente contamos con más de 166 profesionales que contribuyen de forma desinteresada a contar su experiencia, a explicarle a la chica y chicos por qué decidieron estudiar una carrera, cómo, cómo ha sido su vida personal y profesional y animarlas a que también sigan su camino. Me gustaría, por tanto, agradecer enormemente la colaboración de estas 166 profesionales.

P: ¿Es la educación la clave para el éxito de la igualdad real?
R: La educación es la clave, la base de todo. Es la etapa donde más se influye, donde nacen los estereotipos y que seguramente marcará el camino que luego va a determinar decisiones que tomaremos en nuestra vida profesional. 
La educación es fundamental; una educación basada en la multidisciplinariedad, en potenciar las habilidades de los niños y niñas. Esto es fundamental para que luego se sientan capaces de hacer todo lo que se propongan. Es clave para que no se creen brechas.

P: ¿Son los parques científicos y tecnológicos ejemplos reales para mostrar la capacidad de hombres y mujeres tanto en gestión de los propios recintos como en las empresas o centros de investigación?

R: Ese es, precisamente, uno de los objetivo de la Asociación de Parque Científicos y Tecnológico de España. Los parques científicos y tecnológico españoles son lo más interesado en contar con la diversidad en los equipos de las empresas, de las entidades. Porque esa diversidad en aspectos tan importantes para la economía como la ciencia y la tecnología, es fundamental para que luego contemos con un sistema de innovación más competitivo. Los parques científicos y tecnológicos siempre han estado muy concienciados con este importante objetivo. 
Antes de que APTE iniciara su programa “Ciencia y Tecnología en Femenino”, los parques a nivel individual ya habían desarrollado sus propias iniciativas para contar con empresas y equipos multidisciplinares, diversos y muy competitivo. 
Poniendo el foco en los propios parques, el 40,43% de sus trabajadores son mujeres, frente al 57,60% de hombres. Además, el 32% de estos recintos están gestionado por mujeres.

P: ¿Cómo nació “Ciencia y Tecnología en Femenino? ¿Qué balance hace de esta ambiciosa iniciativa? 
R: “Ciencia y Tecnología Femenino” nació en el año 2008 precisamente para contribuir a reducir la brecha de género, sobre todo las disciplinas relacionadas con las Tecnologías de la Información y la Comunicación, las TIC, que es el sector más representativos en estos recintos y donde la brecha es más acusada. Actualmente la participación femenina en este sector se sitúa en el entorno del 12%.

“Ciencia y  Tecnología en Femenino” busca despertar estas vocaciones en etapas tempranas, sobre todo en alumnos de entre 1º y 3º de ESO, que es cuando tienen que decidir si se inclinan por las Humanidades o por la Tecnología. Este programa pretende crear cantera para que, a medio plazo, pueda tener su reflejo en las empresas, que cuenten con equipos más disciplinares y que incluyan al 100% de la población. 

Nuestro balance no puede ser más que positivo: por las cinco ediciones que hemos completado han pasado más de 15.000 alumnos y alumnas. Estimamos que alrededor del 8% de las chicas deciden cambiar de idea y apostar, o por lo menos plantearse, estudiar una carrera STEM. 
Se han hecho desarrollado más de 150 jornadas en los distintos parques científicos y tecnológicos y se han editado guías en las que se muestran las opciones laborales. Una de esas guías se ha dedicado en concreto a las tecnologías digitales disruptivas, porque es donde la brecha de género es más importante y donde es más necesaria la participación de las mujeres. 

Gracias a ello hemos creado una metodología de trabajo que incluso la hemos reflejado en un paper que ha sido publicado en una revista internacional, Journal of Gender Studies. 

Con todo ello no puedo estar más que satisfecha, aunque teniendo claro que vamos a seguir impulsando este programa, desde el que la APTE quiere aportar su granito de arena para reducir la brecha de género en ámbitos tecnológicos.